En un viejo país ineficiente,
algo así como España entre dos guerras
civiles, en un pueblo junto al mar,
poseer una casa y poca hacienda
y memoria ninguna. No leer,
no sufrir, no escribir, no pagar cuentas,
y vivir como un noble arruinado
entre las ruinas de mi inteligencia.
Jaime Gil de Biedma
http://www.poesi.as/jgb68020.htm
Somos los número uno de las bibliotecas
-
Efectivamente, los filósofos somos los primeros en las bibliotecas. O, para
ser más exactos, somos los número uno, porque los primeros son el cero
(000),...
Hace 2 semanas